Pinzón-Espitia OL, et al. Rev. Nutr. Clin. Metab. 2025;8(1):41-55.
Protocolo de nutrición parenteral domiciliaria en adultos
Home parenteral nutrition protocol for adults
Protocolo de nutrição parenteral domiciliar para adultos
Olga Lucía Pinzón-Espitia1*, María del Pilar Morales-Huertas2, Julieth Carolina Castillo-Cañón3, Susan Martínez3, Linda Margarita Ibatá-Bernal3
Recibido: 05 de diciembre de 2024. Aceptado: 22 de mayo de 2025.
Publicado en línea: 26 de mayo de 2025.
https://doi.org/10.35454/rncm.v8n1.681
1 Facultad de Medicina, Departamento de Nutrición Humana, Universidad Nacional de Colombia, Asociación Colombiana de Instituciones de Salud Domiciliaria. Bogotá D.C., Colombia.
2 Medical Affairs Colombia & South Markets, Baxter International Inc.
3 EpiThink Health Consulting. Bogotá D.C., Colombia.
*Correspondencia: Olga Lucía Pinzón-Espitia.
investigaciones@epithink.com
Resumen
Introducción: la nutrición parenteral domiciliaria (NPD) es una alternativa para el soporte nutricional en quienes está indicado; favorece la calidad de vida y autonomía del paciente. La prestación de este servicio requiere la estandarización de la práctica basada en la mejor evidencia.
Objetivo: proporcionar orientaciones adaptadas al contexto colombiano para la prestación adecuada y segura de la NPD en adultos.
Métodos: se desarrolló una revisión de literatura dirigida con búsqueda en bases de datos electrónicas (Pubmed, Medline) así como desarrolladores y compiladores de guías de práctica clínica, empleando el término MeSH “Home parenteral nutrition” en inglés y español. La búsqueda se limitó a los últimos cinco años con corte a mayo del 2024. Se revisaron y seleccionaron las guías de mejor calidad, evaluadas mediante la herramienta AGREE II (Appraisal of Guidelines for Research and Evaluation II). Las recomendaciones extraídas de la evidencia se adaptaron a la práctica nacional por un grupo multidisciplinario de profesionales expertos en el tema. Los aspectos relevantes para la implementación fueron analizados.
Resultados: tres guías clínicas fueron seleccionadas como base de evidencia. Luego de la adaptación, las recomendaciones se agruparon en principios básicos, indicaciones, criterios de seguridad, uso y cuidados de dispositivos, línea de infusión y del sitio del catéter, mezclas nutricionales, monitorización, capacitación para el paciente y su cuidador. Se desarrolló un algoritmo como herramienta para la implementación.
Conclusión: el cumplimiento de estándares de atención para el uso de NPD a través de equipos multidisciplinarios y acciones efectivas basadas en evidencia facilita la implementación de la NPD efectiva y segura.
Palabras clave: servicios de atención de salud a domicilio; insuficiencia intestinal; nutrición; nutrición parenteral en el domicilio.
Abstract
Introduction: Home Parenteral Nutrition (HPN) is an alternative form of nutritional support for patients who require it. It helps improve their quality of life and autonomy. This nutritional intervention requires standardization of practice based on the best available evidence.
Objective: To provide guidelines, adapted to the Colombian context, for the safe and appropriate provision of HPN to adults.
Methods: A directed literature review was conducted by searching databases (PubMed, Medline), as well as consulting clinical practice guideline developers and compilers, using the MeSH term “Home parenteral nutrition” in English and Spanish. The search was limited to the last five years with a cutoff date of May 2024. The highest-quality guidelines were reviewed and selected, and evaluated using the AGREE II (Appraisal of Guidelines for Research and Evaluation II). The recommendations extracted from the evidence were adapted to national practice by a multidisciplinary group of professionals with expertise in the subject. Aspects relevant to implementation were analyzed.
Results: Three clinical guidelines were selected as the evidence base. Following adaptation, the recommendations were grouped into key areas: basic principles, indications, safety criteria, use and care of devices, infusion lines and catheter sites, nutritional mixtures, monitoring, and patient and caregiver education. An algorithm was developed to assist with implementation.
Conclusion: Adherence to standards of care for the use of HPN by multidisciplinary teams, along with effective evidence-based interventions, facilitates the implementation of safe and effective HPN.
Keywords: Home care services; Intestinal failure; Nutrition; Parenteral nutrition; Home.
Resumo
Introdução: a nutrição parenteral domiciliar (NPD) é uma alternativa de suporte nutricional para pacientes que têm indicação, favorecendo sua qualidade de vida e autonomia. A prestação desse serviço requer a padronização da prática com base nas melhores evidências científicas.
Objetivo: fornecer diretrizes adaptadas ao contexto colombiano para a prestação adequada e segura de DPN em adultos.
Métodos: Foi realizada uma revisão bibliográfica direcionada por meio de busca em bases de dados (Pubmed, Medline), bem como em desenvolvedores e compiladores de diretrizes de prática clínica, utilizando o termo “Home parenteral nutrition” em inglês e espanhol. A busca limitou-se aos últimos 5 anos, com data limite de corte em maio de 2024. As diretrizes de maior qualidade foram revisadas e selecionadas, avaliadas pela ferramenta AGREE II (Appraisal of Guidelines for Research and Evaluation II). As recomendações extraídas das evidências foram adaptadas à prática nacional por um grupo multidisciplinar de profissionais com expertise no tema. Aspectos relevantes para a implementação foram analisados.
Resultados: três diretrizes clínicas foram selecionadas como base de evidências. Após a adaptação, as recomendações foram agrupadas em: princípios básicos, indicações, critérios de segurança, uso e cuidados com dispositivos, linha de infusão e local do cateter; misturas nutricionais, monitoramento, treinamento de pacientes e cuidadores. Como ferramenta para implementação, foi desenvolvido um algoritmo.
Conclusões: a adesão aos padrões de atendimento para o uso de NPD por meio de equipes multidisciplinares e ações eficazes baseadas em evidências facilita a implementação de NPD eficaz e segura.
Palavras-chave: serviços de assistência médica domiciliar; insuficiência intestinal; nutrição; nutrição parenteral; nutrição parenteral no domicílio.
Introducción
La nutrición parenteral (NP) es un tratamiento médico que se ofrece a pacientes en riesgo nutricional o con desnutrición, como una alternativa para satisfacer los requerimientos nutricionales cuando la ingesta de nutrientes por vía oral o enteral no es posible(1). Las indicaciones más frecuentes son los trastornos de la deglución por enfermedades neurológicas, obstrucciones por tumores malignos, caquexia por cáncer, malabsorción o alteraciones de la digestión(1,2). En pacientes con estas condiciones, la necesidad de administrar NP se ve favorecida en un contexto de atención domiciliaria(3), ya que permite ofrecer este tratamiento en un entorno familiar para él. Este enfoque contribuye a una mejora en su estado nutricional, una mejor respuesta terapéutica, mayor supervivencia y una significativa mejora en la calidad de vida(4).
La evidencia de uso de la NP domiciliaria (NPD) ha mostrado que promueve la autonomía del paciente o su cuidador en el control del tratamiento(5). En adultos mayores con comorbilidades, la NPD guiada por profesionales expertos es segura y genera ahorros al sistema de salud al reducir la estancia hospitalaria y los riesgos asociados, como las infecciones nosocomiales e infecciones relacionadas con el catéter(6). En relación con esto, en diferentes escenarios sanitarios las evaluaciones económicas destacan que aunque los costos directos son altos, la NPD ahorra costos en comparación con la NP hospitalaria y es costo efectiva(5,7,8).
Pese a las ventajas descritas, la implementación de la NPD enfrenta desafíos en términos de logística y calidad en la prestación del servicio para la entrega óptima de la NP. Con este fin, un programa adecuado de NPD debe incluir procesos estandarizados para gestionar el riesgo de los pacientes, considerando además las necesidades individuales para reducir el impacto emocional en ellos y sus familias(9). Es esencial contar con un equipo multidisciplinario coordinado y un plan de atención individualizado, que proporcione capacitación e información detallada al paciente y sus cuidadores sobre los procesos de administración y el régimen nutricional(10).
En el contexto descrito, el desarrollo de un protocolo de NPD puede orientar la prestación de este servicio, al homogeneizar la práctica para una entrega segura, efectiva y adaptada a las necesidades individuales del paciente. Este documento brinda recomendaciones basadas en la evidencia para la entrega exitosa de la NPD en Colombia, tomando en cuenta las características del sistema de salud local, las infraestructuras disponibles y los recursos humanos formados en este campo. Además, promueve la colaboración interdisciplinaria y facilita la monitorización y la evaluación de los resultados, garantizando la mejora continua en la calidad del servicio. Su implementación contribuirá a optimizar los resultados clínicos y a reducir los riesgos asociados con la NPD, lo que asegura además una atención más personalizada y accesible para todos los pacientes. El objetivo de este protocolo es proporcionar orientaciones adaptadas al contexto colombiano, obtenidas mediante una revisión de literatura dirigida, para la prestación adecuada y segura de la NPD en adultos, con el fin de optimizar su estado de salud y calidad de vida, minimizar riesgos y complicaciones, y asegurar un manejo efectivo y eficiente.
Puntos clave
1. La implementación adecuada y segura de la nutrición parenteral domiciliaria (NPD) en adultos permite optimizar el estado de salud y la calidad de vida del paciente, al tiempo que minimiza riesgos clínicos y asegura un manejo integral, efectivo y eficiente del tratamiento en el entorno domiciliario.
2. Un programa de NPD debe contar con un equipo interdisciplinario capacitado en las mejores prácticas y con experiencia en la prestación de este servicio.
3. El paciente debe estar suficientemente estable metabólicamente (sin riesgo inmediato de desequilibrio agudo) después del alta hospitalaria para inicio de la NPD.
4. En los pacientes en quienes se planea NPD, debe realizarse una verificación previa de los requisitos, propios y del entorno, indispensables para garantizar una atención segura.
5. Los programas de NPD deben incluir capacitación formal e individualizada para el paciente, cuidador y enfermeras de atención domiciliaria; realizada en un entorno hospitalario o en el domicilio del paciente, y con instrucciones orales y escritas.
6. El desarrollo de protocolos basados en la evidencia reduce errores y complicaciones asociadas a la práctica clínica al estandarizar los procesos de NPD.
7. El sistema de salud colombiano cuenta con facilitadores de infraestructura, acceso a tecnologías y políticas de apoyo que permiten la implementación efectiva de la NPD.
Materiales y métodos
El grupo desarrollador de este protocolo se conformó por profesionales expertas en nutrición y un equipo metodológico con experiencia en el desarrollo de documentos basados en evidencia. La validación de contenidos fue realizada junto con un equipo de enfermeros profesionales, nutricionista dietista y químico farmacéutico. Previo al inicio del protocolo, los desarrolladores declararon los posibles conflictos de interés según el Manual de Procesos Participativos del Instituto de Evaluación Tecnológica en Salud (IETS)(11). El grupo desarrollador definió el alcance y los objetivos del protocolo mediante consenso, priorizando información sobre dispositivos, mezclas nutricionales, seguridad para la implementación, capacitación, seguimiento y marco normativo.
Se realizó una revisión de literatura de guías o documentos de recomendaciones en bases de datos electrónicas y motores de búsqueda (PubMed, Medline), así como desarrolladores y compiladores de guías de práctica clínica (GPC). La búsqueda se limitó a las publicaciones de los últimos cinco años con corte a mayo del 2024, empleando el término clave “Home parenteral nutrition” y “Nutrición Parenteral en el Domicilio”. Se consideraron los documentos en texto completo, en inglés o español. Se identificaron 22 documentos. Tres GPC fueron identificadas y evaluadas en términos de calidad según el instrumento para AGREE II(12). En la Tabla 1, se describe la evaluación de las GPC. En la Figura 1, se describe el diagrama de flujo de la búsqueda, tamización y selección de evidencia (PRISMA).
Tabla 1. AGREE II de GPC en Nutrición Parenteral Domiciliaria
Dominio |
ESPEN 2022 |
BIFA 2021 |
American Society 2019 |
Dominio 1. Alcance y objetivo |
77,8 % |
61,1 % |
61,1 % |
Dominio 2. Participación de los implicados |
77,8 % |
33,3 % |
55,6 % |
Dominio 3. Rigor en la elaboración |
60,4 % |
43,8 % |
52,1 % |
Dominio 4. Claridad de la presentación |
72,2 % |
44,4 % |
44,4 % |
Dominio 5. Aplicabilidad |
62,5 % |
8,3 % |
12,5 % |
Dominio 6. Independencia editorial |
91,7 % |
83,3 % |
83,3 % |
BIFA: British Intestinal Failure Alliance; ESPEN: European Society for Clinical Nutrition and Metabolism. Adaptada de: Pironi L, et al. Clin Nutr. 2023;42(3):411-30(1); Mercer-Smith GW, et al Frontline Gastroenterol. 2021;12(7):656-663(13); Kovacevich DS, et al. JPEN J Parenter Enteral Nutr. 2019;43(1):15-31(14).
La extracción de evidencia se realizó priorizando los documentos de mejor calidad metodológica, correspondientes a la Guía Práctica ESPEN: nutrición parenteral domiciliaria(1) de la European Society for Clinical Nutrition and Metabolism (ESPEN); Monitorización hematológica y bioquímica de pacientes adultos que reciben nutrición parenteral domiciliaria(13) de la British Intestinal Failure Alliance (BIFA) y las Directrices para la selección y el cuidado de dispositivos de acceso venoso central para la administración de nutrición parenteral domiciliaria de la American Society for Parenteral and Enteral Nutrition(14). Las recomendaciones fueron extraídas de estos documentos y analizadas por el grupo desarrollador y el juicio del grupo multidisciplinario de profesionales, para adaptarlas al contexto nacional. La selección final de contenidos y modificaciones al manuscrito hasta su versión final fue realizada por los desarrolladores. Adicionalmente, se realizó una búsqueda dirigida acerca del marco normativo, facilitadores y barreras a la implementación de la NPD en Colombia.
Figura 1. Diagrama de flujo de la búsqueda, tamización y selección de evidencia (PRISMA).
¿Cómo interpretar este protocolo?
Este documento pretende ser orientador para los médicos, enfermeras, nutricionistas dietistas, farmacéuticos, proveedores de servicios de atención domiciliaria y demás interesados en la prestación de la NPD. También puede ser un apoyo para aseguradores e instituciones prestadoras de servicios de salud en la implementación de programas en NPD, así como una herramienta para pacientes y cuidadores en la comprensión del tratamiento.
Las orientaciones contenidas en este documento no constituyen un estándar rígido de atención; la implementación de protocolos de NPD deben tener como base un enfoque individualizado que considere los valores y preferencias del paciente y la realidad del entorno clínico, incluyendo la disponibilidad de recursos y tecnologías. Este documento se actualizará a medida que se disponga de nueva evidencia o tengan lugar cambios organizacionales sanitarios relevantes para la práctica clínica.
Resultados
Principios básicos en NPD
En la Figura 2, se resume la aplicación del protocolo de NPD, con los componentes que se describen a continuación.
Tabla 2. Ficha de paciente con nutrición parenteral domiciliaria
Datos del paciente
|
Características del catéter
|
Bolsa de NP
|
Método de administración
|
Bomba de infusión
|
Otros elementos requeridos
|
Adaptada de: Ministerio de Sanidad y Política Social. Guía de Nutrición Parenteral Domiciliaria en el Sistema Nacional de Salud. España; 2009(46).
Figura 2. Algoritmo de nutrición parenteral domiciliaria. CCIP: catéter central de inserción periférica; CVC: catéter venoso central; DAVC: dispositivo de acceso venoso central; EAN: equipo de apoyo nutricional; NPD: nutrición parenteral domiciliaria.
Evaluación inicial para NPD
La evaluación inicial del paciente comienza con una evaluación nutricional integral (historia clínica completa, medidas antropométricas, análisis de laboratorio, evaluación clínica y diagnóstico nutricional), la determinación del riesgo y la indicación para NPD, según el escenario clínico. La NPD debe administrarse a aquellos pacientes que no pueden satisfacer sus necesidades nutricionales por vía oral o enteral y que pueden ser tratados de forma segura fuera del hospital. Los principios de indicación de la NPD se resumen a continuación.
La NPD es actualmente el tratamiento preferido para pacientes con FIC que necesitan nutrición y terapia intravenosa para mantener un estado nutricional adecuado sin necesidad de hospitalización convencional(15). La NPD en adultos se administra principalmente en pacientes con patología maligna, seguido de la no maligna como en enfermedad de Crohn, enfermedad isquémica, enteritis por radiación, complicaciones poscirugía, entre otras(16). En la FIC debida a enfermedad maligna, algunos estudios han descrito beneficios en calidad de vida relacionada con la salud, aumento en la grasa corporal, mejora en la capacidad máxima de ejercicio, prevención de una muerte más temprana por desnutrición y alcance de mayor supervivencia(17–19).
Aunque no existen contraindicaciones absolutas para el uso de la NP, este tipo de terapia no debe ofrecerse si los pacientes no son lo suficientemente estables metabólicamente para ser dados de alta con NP o si no están adecuadamente informados sobre los objetivos, beneficios y riesgos, su pronóstico o la posibilidad de cambiar o retirar el tratamiento cuando ya no sea útil. Adicionalmente, la NP requiere adaptaciones específicas en pacientes con fallas orgánicas y enfermedades metabólicas. En la Tabla 3, se describen los diferentes requisitos de la NPD en la atención de pacientes en diferentes escenarios clínicos.
Tabla 3. Objetivos del programa NPD, suplementación intravenosa y requisitos de atención del paciente
Programa de NPD/requisito de atención al paciente |
Escenario de falla intestinal crónica benigna |
Escenario de falla intestinal crónica maligna |
Escenario sin falla intestinal crónica |
Objetivo (adicional a evitar la muerte por desnutrición) |
Rehabilitación social, laboral y familiar; mejor calidad de vida; rehabilitación intestinal |
Tratamiento de FIC por terapia oncológica en curso o por obstrucción gastrointestinal Cuidados paliativos |
Alternativa a otras modalidades potencialmente efectivas de soporte nutricional (por ejemplo, enteral) rechazadas por el paciente |
Duración esperada |
Temporal o permanente (de por vida) |
Temporal en su mayoría: Corta <seis meses Larga >seis meses |
Temporal o permanente |
Requerimientos de suplementación intravenosa |
Suplementario o total; a menudo se requiere un alto volumen de líquido y contenido de electrolitos |
FIC: en su mayoría suplementario, pero puede ser total; volumen normal, (en obstrucción gastrointestinal muchos pueden requerir un volumen alto). Paliativo: en su mayoría total; volumen normal/bajo |
Mayormente suplementario con volumen normal |
Tipo de mezcla de NP más frecuente requerido |
NP individualizada que requiere refrigeración |
NP lista para usar (premezclas)1 |
NP lista para usar1 (premezclas) |
Movilidad del paciente y dependencia del cuidador |
En su mayoría independiente y ambulatorio (dependiendo de edad y comorbilidad). Viajar por trabajo y vacaciones a menudo requerido. |
FIC: ambulatorio o confinado en casa, en su mayoría dependiente. Paliativo: confinado en casa, de la cama a la silla, dependiente. |
Ambulatorio o confinado en casa (trastornos neurológicos), a veces dependiente |
Requerimiento de asistencia de una enfermera de atención domiciliaria |
Dependiendo de la edad y la comorbilidad |
Frecuente |
Algunas veces |
1Definida cómo un tipo de nutrición parenteral que permite aportar nutrientes directamente al torrente circulatorio por vía periférica al tener una osmolaridad menor a 900 mOsm/L(47).
FIC: falla intestinal crónica; NP: nutrición parenteral. Adaptada de: Méndez-Martínez C, et al. Medicina (Mex). 2023;45(3):275–83(48); Pironi L, et al. Clin Nutr, 2023;42(3):411–30(1).
Criterios de seguridad para la implementación de NPD
Los objetivos de un programa de NPD incluyen la provisión de terapia basada en evidencia, la prevención de complicaciones relacionadas con la NPD y la garantía de maximizar la calidad de vida(20,21). De acuerdo con esto, se debe proporcionar un plan de apoyo nutricional individualizado, supervisado y evaluado periódicamente. El proveedor de atención médica que ofrezca la NPD debe cumplir con la normatividad vigente en relación con la habilitación de la prestación de los servicios de salud (actualmente lo dispuesto en la Resolución 3100 de 2019(22)) y garantizar la mezcla nutricional prescrita y los demás insumos necesarios para una terapia segura y eficaz, así como las condiciones adecuadas tanto del paciente como del domicilio(23). Los prerrequisitos para implementar la NPD se resumen en lo siguiente:
Equipo de apoyo nutricional
El equipo de apoyo nutricional (EAN) debe estar conformado por expertos en prestación de NPD, esto incluye médicos, enfermeras especialistas (incluso en el cuidado de catéteres y estomas), nutricionistas dietistas y farmacéuticos. Es importante incluir en el equipo multidisciplinario los profesionales que colocan el catéter venoso central (CVC), como anestesiólogo, radiólogo y cirujano(24); y, en caso de requerirse, trabajador social, fisioterapia, psicología y terapia ocupacional.
Las principales responsabilidades del EAN son evaluar, antes y después del alta hospitalaria, si el paciente es candidato para la NPD; capacitar al paciente y al cuidador para infundir la NP de manera segura con monitorización y reconocimiento rápido de complicaciones; proporcionar seguimiento y tratamiento para la atención de rutina o de emergencia, con detalles de contacto apropiados proporcionados al paciente las 24 horas del día, los siete días de la semana.
Debe evaluar aspectos como la idoneidad y estabilidad médica, física, psicológica y emocional del paciente, potencial de rehabilitación y mejora de la calidad de vida; potencial de aprendizaje de la autogestión de la NP del paciente y cuidadores; estilo de vida y actividades de la vida diaria; nivel de atención y apoyo domiciliario requerido; proveedor de atención domiciliaria, conocimiento y experiencia del equipo de enfermería domiciliaria; disponibilidad las 24 horas del proveedor de atención domiciliaria; instrucciones básicas de seguridad, instalaciones y limpieza general en el hogar; necesidad de equipo adicional (ejemplo: bomba de infusión, cama de hospital, soporte de goteo adicional); estabilidad del régimen de NP (dosis y mezcla); reembolso de bolsas, servicios y suministros; necesidades y posibilidades de monitorización posterior al alta, incluidas las pruebas de laboratorio programadas; y formulación de medicamentos con detalles de administración.
Dispositivo de acceso venoso central, bomba de infusión y control de la infusión
Con respecto a los dispositivos para la NPD, se realizan las siguientes consideraciones: la elección del (dispositivo de acceso venoso central (DAVC) y la ubicación del sitio de inserción la debe realizar el EAN, en función de la duración del tratamiento, la elección del paciente y la capacidad del paciente o cuidador para cuidar el DAVC(14); el sitio de inserción del DAVC debe visualizarse fácilmente y ser accesible para los pacientes que se cuidan solos, por lo que deben participar en la elección de la ubicación del sitio de inserción cutánea, evitando cercanía a heridas, sitios de inserción anteriores, traqueostomías, estomas o fístulas(25). En NPD a corto plazo (menos de seis meses), se pueden utilizar CVC de inserción periférica (CCIP). En caso de usar DAVC, debe colocarse al nivel de la unión aurícula derecha-vena cava superior.
En NPD a largo plazo (más de seis meses) se deberán utilizar DAVC tunelizados o DAVC totalmente implantados. El acceso a la vena cava superior debe ser la primera opción para la colocación del DAVC, a través de la vena yugular interna o la vena subclavia. Se recomiendan DAVC de una sola luz, ya que se ha reportado una mayor frecuencia de infección con dispositivos de múltiples líneas(26–29) y se debe preferir el acceso por el lado derecho al izquierdo para reducir el riesgo de trombosis(29,30).
Para el control de la infusión de la NPD, se recomienda el uso de bomba de infusión, especialmente durante la noche(31,32). Una bomba portátil puede brindar independencia del paciente respecto al dispositivo(33,34) y una bomba de infusión electrónica con equipos de administración compatibles se considera una buena práctica(35,36). Dadas las características de la NPD, debe garantizarse la administración de volúmenes y velocidad controlada en tiempos fijos establecidos.
En circunstancias excepcionales, bajo protocolos institucionales que garanticen la seguridad del paciente, se puede evaluar el uso temporal de un regulador de flujo para NPD, ya que la administración rápida de la NP puede causar daños debido al volumen de líquido, la hipertonicidad de la mezcla de NP y la cantidad de glucosa y potasio administradas(37). No se deben utilizar equipos de administración con solo una abrazadera de rodillo.
Para el cuidado de dispositivos y línea de infusión y la reducción del riesgo de infección, deben tenerse en cuenta las siguientes recomendaciones:
Respecto a los cuidados del sitio de inserción del DAVC se recomienda:
Respecto al uso de los conectores, se debe tener en cuenta que:
Las mezclas de NPD deben cumplir con todos los requerimientos del paciente. Estas pueden ser mezclas listas para usar disponibles comercialmente o mezclas personalizadas y adaptadas a los requerimientos individuales del paciente. Existen opciones de bolsas individuales, bolsas de doble cámara o tres bolsas todo en uno (all-in-one parenteral nutrition admixture [AIO]). Estas últimas contienen compartimentos separados para emulsión de lípidos/glucosa/aminoácidos que se abren y mezclan antes de la infusión. Se pueden añadir vitaminas y oligoelementos antes de la infusión en el domicilio, si la compatibilidad y estabilidad son adecuadas. Las mezclas de nutrientes AIO son las más recomendadas debido a menores riesgos y menor manipulación(45). En el caso de mezclas de NPD personalizadas, se pueden preparar mediante compuestos individuales o mediante bolsas multicámara comerciales preparadas y adaptadas listas para usar, de acuerdo con las instrucciones del fabricante y utilizando una técnica de mezcla aséptica, preferiblemente en una cabina. Las recomendaciones respecto a mezclas nutricionales se presentan en la Tabla 4.
Tabla 4. Requisitos para la preparación y entrega de mezclas nutricionales en NPD
Proceso |
Recomendaciones |
Estabilidad |
|
Etiquetado |
|
Entrega |
|
Tiempo de mezcla de NPD y velocidad de infusión |
|
1Definida cómo un tipo de nutrición parenteral que permite aportar nutrientes directamente al torrente circulatorio por vía periférica al tener una osmolaridad menor a 900 mOsm/L(47).
AIO: All in one; NP: nutrición parenteral. Adaptada de: Méndez-Martínez C, et al. Medicina (Mex). 2023;45(3):275–83(48); Pironi L, et al. Clin Nutr, 2023;42(3):411–30(1); Mühlebach S, et al. En: Sobotka L, editor. Basics in clinical nutrition. 5.a ed. Praga: Galén; 2018(49).
Seguimiento de pacientes en NPD
El objetivo del seguimiento es evaluar la eficacia nutricional del programa de NPD, la tolerancia a la NP, prevenir, identificar e intervenir complicaciones; y evaluar el manejo del catéter de infusión por parte del paciente o el cuidador, la calidad de vida y la calidad de la atención(13,21). Es por esto que deben seguirse las siguientes recomendaciones:
Tabla 5. Parámetros para evaluar en los pacientes con NPD
Parámetros |
Frecuencia |
Condición general* Temperatura* Peso corporal* |
Diariamente si es inestable, dos veces por semana o una vez por semana si es estable. |
Índice de masa corporal |
Mensual |
Balance de líquido*
|
La frecuencia y el tipo de parámetros dependerán de la etiología de FIC y estabilidad de los pacientes. En caso de producción elevada de heces (yeyunostomía final), el seguimiento después de la primera descarga debe ser diaria luego dos veces por semana. Una vez estable, una vez a la semana. |
Salida del catéter subcutáneo* |
A diario |
Seguimiento hematológico y bioquímico |
|
|
La frecuencia y el tipo de parámetros dependerán de la etiología. de la condición subyacente que requiere NPD y la estabilidad de pacientes. |
|
Semanal o mensualmente, luego cada tres o cuatro meses cuando el paciente está estable. |
|
Mensualmente, luego cada tres o cuatro meses cuando esté estable. |
|
Mensualmente, luego cada tres o cuatro meses cuando esté estable. |
|
Anual |
|
Cada seis a doce meses |
|
Cada tres a seis meses |
|
Cada seis a doce meses |
|
Cada seis a doce meses |
|
Anual |
|
Cada 12 a 18 meses |
|
Anual |
* Actividades que pueden ser realizadas junto con el cuidador o familiar entrenado en NPD.
** Si la PCR está significativamente elevada (>20 mg/L), se puede medir el hierro con transferrina y saturación de transferrina para ayudar a interpretar el estado del hierro. En esta situación se debe tener cuidado en la interpretación del zinc, cobre, selenio y vitaminas A, D y E en vista de su respuesta inflamatoria(13).
*** Si la concentración de triglicéridos está elevada se debe repetir la concentración en ayunas.
ǂ La concentración de sodio en orina es útil para evaluar el equilibrio de sodio en pacientes con intestino corto y una colección de oxalato en orina de 24 horas para evaluar el riesgo de formación de cálculos renales en pacientes con intestino corto y colon en continuidad(13).
ǂǂ Al medir zinc, cobre, manganeso o selenio, debe utilizarse un tubo colector sin oligoelementos(13).
Ca: Calcio; Cl: Cloro; K: potasio; Mg: magnesio; Na: Sodio; P: fósforo; TSH: Hormona estimulante de la tiroides; NPD: nutrición parenteral domiciliaria. Adaptada de: Pironi L, et al. Clin Nutr, 2023;42(3):411–30(1); Mercer-Smith GW, et al. Frontline Gastroenterol. 2021;12(7):656-663(13).
Capacitación para el paciente y su cuidador
Los programas de NPD deben incluir capacitación formal e individualizada para el paciente, cuidador y enfermeras de atención domiciliaria, realizada en un entorno hospitalario o en el domicilio del paciente, y con instrucciones orales y escritas. Esta capacitación debe incluir:
Consideraciones para la implementación
Actualmente, el país cuenta con diferentes facilitadores que permiten la implementación de un protocolo de NPD. Existe un marco normativo que regula la prestación de la atención domiciliaria bajo criterios mínimos de habilitación. No obstante, también se requiere el cumplimiento de condiciones propicias en el hogar que garanticen la administración de la NPD de una manera segura y sea verificada en una visita domiciliaria, evaluando aspectos de accesibilidad, disponibilidad de servicios públicos y baño, además de un área de almacenamiento de residuos.
Es posible el uso de telesalud o telemedicina como una herramienta para facilitar la orientación a pacientes y familias frente a la NPD, y el seguimiento a la terapia.
La atención domiciliaria es financiada por el sistema de salud junto con la NP, por lo que el acceso no debería ser una barrera para la implementación de este protocolo. La gestión del riesgo de un programa de NPD debe incluir el seguimiento y evaluación del proceso, mediante indicadores mínimos como incidencia de infección relacionada con el catéter, incidencia de reingreso hospitalario, satisfacción del paciente, calidad de vida y tasa de supervivencia (enfermedades benignas). En la Tabla 6, se proponen los principales indicadores encontrados en la literatura.
Tabla 6. Indicadores para monitorizar la seguridad de la provisión del programa de NPD
Indicadores |
Cálculo del indicador |
Disponibilidad de persona de contacto las 24 horas del día |
|
Disponibilidad de enfermera a domicilio experimentada y capacitada |
|
Incidencia de infección relacionada con el catéter* |
|
Incidencia de trombosis relacionada con el catéter** |
|
Incidencia de reingreso hospitalario |
|
Satisfacción del paciente |
|
Calidad de vida relacionada con la salud (CVRS) |
Escala de calidad de vida antes y después de la intervención (NPD) evaluada con una herramienta de calidad de vida*** |
Tasa de supervivencia (enfermedades benignas) |
|
* Se espera una incidencia de infección relacionada con el catéter por debajo de 0,49 por 1000 días de catéter(50).
**Se espera una incidencia de trombosis menor que 0,4 por catéter/año(51).
*** Algunos estudios han evaluado la Calidad de Vida Relacionada con la Salud (CVRS) con instrumentos como generales como SF38, SF36, EQ-5D-5L o específicos como el Cuestionario de resultados informados por el paciente sobre nutrición parenteral domiciliaria(52) o el cuestionario de impacto de la nutrición parenteral(53). Sin embargo, solo la EQ5D-3L es una herramienta validada en Colombia(54).
Adaptada de: Kopczynska M, et al. Nutrients. 2022;14(16):3379(50); Mateo-Lobo R, et al. Nutrients. 2019;11(9):2083(51); Carey S, et al. J Hum Nutr Diet. 2023;36(5):1741-50(52); Sowerbutts AM, et al. Clin Nutr. 2021;40(5):3210-20(53); Rojas-Reyes MX, et al. Rev Salud Pública 2017;19:340–6(54).
Esta revisión tiene algunas limitaciones que deben ser consideradas, como no proceder de una revisión sistemática y haber incluido solo documentos en inglés y español, lo que podría haber excluido otra información relevante. No obstante, la búsqueda permitió identificar la evidencia reciente, relevante y de mejor calidad.
Conclusión
La NPD representa una alternativa viable y segura para el soporte nutricional de pacientes con necesidades especiales en el domicilio. Su implementación favorece la calidad de vida y autonomía del paciente y su familia. Debe contarse con un protocolo de NPD que pueda ser aplicado por un equipo interdisciplinario que cuente con la experticia para el manejo de este tipo de pacientes y recomendaciones basadas en la evidencia que permitan la efectividad de la NP y minimicen los riesgos y complicaciones.
Declaración de autoría
Conceptualización: OLPE y MPMH; metodología, tratamiento de datos, redacción del borrador original, redacción, revisión y edición, visualización, supervisión: OLPE, MPMH, JCCC, SM y LMIB.; administración y supervisión del proyecto: OLPE y MPMH; obtención de financiación: MPMH. Todos los autores han leído y aceptado la versión publicada del manuscrito.
Conflicto de interés
MPMH trabaja para Baxter International Inc. Los demás autores declaran no tener conflicto de interés.
Financiamiento
Esta investigación recibió financiamiento de Baxter International Inc. para la asistencia de redacción médica.
Referencias bibliográficas